Sandeces de una mente a medio funcionar

He borrado dos veces lo que he estado escribiendo. ¿Por qué? Porque tengo la mente nublada por el sueño, y estoy muy desconcentrado. Tendré esto en cuenta para que las próximas veces me siente a escribir con algo más de lucidez, o al menos sin sueño. Mi estado es tan lamentable que ¡Cometo erroeres cada 3 SEGUNDOS (incluso dejé un error sin corregir, para que lo vean)! Sólo se me ocurren, dada mi actual situación, dos alternativas para combatir la torpeza digital: preparar 3 litros de café (me gusta mucho prepararlo frío) o comer una manzana verde, o dormir temprano y reanudar el trabajo a eso de las 4 de la mañana. Ambas opciones parecen muy distantes, pero si se combinan, el trabajo puede hacerse a tiempo. El producto quedará mediocre, pero terminado.

Ya estoy escribiendo sandeces. Me voy.

¿Qué es eso de Frailejón Desnudo?

Y ahí va el primer interrogante. De repente pensé que tal vez a alguien le interesaría saber por qué he llamado a este blog como lo he llamado. Podría ser que no, que a nadie le interese, que este interrogante pase por alto, que los lectores supongan rápidamente que se trata de un nombre hecho al azar, tal vez con alguno de esos generadores de nombres que circulan en la atarraya (para la muestra uno de ésos botones), o que simplemente se trata de un nombre que hice a la carrera, combinando dos cosas que podrían tener algo que ver pero cuya relación no hubiera sido relevante a la hora del bautizo. De todos modos, y aunque a nadie le interese, este interrogante será resuelto, no con mucho lujo en detalles pero sí con los motivos que me llevaron a crear un blog con el nombre que ustedes siempre ven arriba cuando se acercan a él. Tan sólo un detalle: el carácter de rápida actualización que ha hecho populares a los blogs, me permite decir que, como ya no quiero escribir más, este interrogante queda en remojo, y será resuelto en cuanto me decida a elaborar una respuesta que valga la pena y que no obedezca a prisas ni autopresiones, pues no pienso volverme esclavo de un blog, que suficiente tengo ya con el mismísimo internet como para tener más adicciones (aunque el vicio de escribir sería perfecto como adicción para toda mi vida). Además, este primer interrogante me ha dado una buena idea, relacionada con el origen del nombre de este blog, y que intentaré recordar, para que esa idea sea desarrollada. Es más, haré una nota para mí mismo: Recuerde quién andaba con el Frailejón. Es todo lo que se me ha ocurrido para hoy. Sigamos pues, con nuestras vidas.

Espiando a una vecina esporádica

Ayer, cuando había terminado mi tercera entrada, y cuando estaba revisando una que otra cosa que, ya saben -los que tienen blog, claro-, se revisa cuando se está iniciando un blog, y me puse a oprimir el botón que dice siguiente blog, ese que está arriba del título, al lado de las opciones de buscar otros blogs, poner la banderita y otras cosas. Quería ver qué estaba pasando en otros lados de este mundillo curioso que es el de Blogger y todo eso. Y me puse a esperar un buen rato, pues la conexión estos días ha estado fallando un poco pero todavía funciona, hasta que el blog siguiente cargó por completo. Quedé boquiabierto: tenía una vecina muy famosa: se hace llamar Kahlo*, tiene varios blogs, es diseñadora y se toma fotos a sí misma. La tipa ha aparecido en televisión, ha trabajado con revistas y... para qué decir más, desde que vi sus fotos (algo atrevidas, como una combinación entre Amelie y una golfa, citando el programa donde apareció y del que no pienso poner link donde colgaron el video porque ya podrá ser un poco tarde) he quedado sin habla. O en este caso, sin movimiento digital. Estaba tan emocionado; ¡Poder espiar a esta chica, con sus locuras, sus dulces perversiones, su figura de otro siglo, sus fotos sensualmente absurdas... cuando yo quisiera!

Al otro día (o sea el día en el que escribí estas líneas [aunque más bien debería decir la noche en la que estuve escribiendo estas líneas {caramba, como me gustan los paréntesis inútiles} pues son aproximadamente las 11:40pm hora colombiana, lo que significa que ya es de noche por aquí]), todavía con la emoción en la cabeza y algo sonrojado porque iba a espiar a Kahlo de nuevo, pues una vecina como ésta no se ve todos los días así no más, y el vistazo había que aprovecharlo. ¿Qué me deparará esta dulce niña en el día de hoy? ¿Con qué canciones en mp3 me deleitaré -así nunca las escuche- mientras leo sus entradas? ¿Habrá alguna nueva galería de fotos de ella en el Flickr ése? y con éstas preguntas y con toda la tembladera del caso (bueno, estoy exagerando, pero necesitaba la expresión), acerco el puntero del ratón hacia la opción de la parte de arriba que la les dije que decía siguiente blog, y espero... y me encuentro con algo completamente distinto. Una bitácora un tanto (demasiado) desorganizada, de una mujer algo (muy) obsesionada con Chris Farnell**, el vocalista de Audioslave... la mujer incluye en su rinconcito fotos y vídeos de conciertos del ex-Soundgarden, combinadas sin ningún tipo de criterio con fotos de sus amigos, Shrek, Kamelot, Nightwish y muchos, muchos enlaces a vídeos del Tubo que hacen del blog un bulto muy pesado, que me bloqueó el cacharro una vez hubo cargado todo su obtuso contenido. No quiero decir que esta mujer esté mal, está en todo su derecho de hacer con su cosa lo que le dé la virtual gana. Simplemente tuve que admitir que Kahlo ya no es mi vecina, y que será muy difícil que lo vuelva a ser. Al menos tampoco volveré a soportar a esa tortuga de blog...

Gracias a esta pequeña experiencia me dí cuenta de la función que tiene la opción de la que he escrito. Es simple: la opción nos lleva al último blog que se ha actualizado, no importa cual, por lo que siempre aparecerán nuevos blogs al oprimir este botón. Es probable que el sistema no funcione exactamente así, no he consultado en la ayuda de Blogger sobre el tema. De lo que estoy seguro es que siempre aparecerán nuevos vecinos, millones de ellos, y eso me recuerda lo cerca que estamos unos de otros, cuando nos sentamos frente al monitor que cada uno tenga y comenzamos a teclear (o a dictarle a su PC, gracias a unos programas que se consiguen por ahí). Este vecindario es muy grande y caótico, sin duda, y como en los de "verdad", en éste hay mucha variedad, la suficiente al menos como para escoger al azar, a la dedocracia, a lo que caiga. Y eso me parece interesante. Por más cosas extrañas que llegue a ver, por más mescolanzas de Shrek con Nightwish que encuentre, el mundo de los blogs siempre es interesante. Bueno, no debo exagerar, no siempre, pero al menos uno puede hacer muchas cosas, que no podría hacer si a nadie se le hubiera ocurrido crear todo esto. Como tener vecinos esporádicos y aleatorios, a veces famosos y de muy buena pinta (si un día pudiera conocer a la Kahlo en persona, no se qué me pasaría...), otros anónimos y algo despistados, todo depende de lo que se quiera tener, y que se pueda obtener, de este montón de unos y ceros que lo ha revolcado todo. Al fin y al cabo, ya tengo la dirección de la niña de las fotos, y la puedo ir a visitar cuando yo quiera. Total, que para eso se mudó al vecindario.


*: Actualizado el 07/02/2010 - He seguido leyendo a Kahlo por lapsos irregulares, y hace poco vi que esta maravilla de fémina había cambiado su dominio. Aunque la dirección de Blogger nos redirecciona a su nuevo alojamiento, pensé en ahorrar la molestia a quien me lea y dejar el nuevo link aquí. Que se lo gocen.
**: Daniel, desde sus conocimientos colosales sobre música, amablemente me hizo caer en cuenta de mi error con respecto al apellido del ex-vocal de Soundgarden... así que no es Farnell, sino Cornell. Muchas gracias por el aportecillo.

Carajo... - Número 1

Carajo... Vaya que me es difícil escribir, al menos en mis condiciones actuales. El televisor berreando justo detrás mío, mi hermano interrumpiendo a ratos, el ruido de la calle -que a veces es más y a veces es peor-, la luz del día que pega en el monitor y no me deja ver bien lo que estoy tratando de escribir, y un sinnúmero de fenómenos insignificantes por sí solos, pero que juntos conforman un gran fenómeno insignificante que llega a ser fastidioso, y mucho. Y sumado al hecho de que me distraigo el 999.9% del tiempo mirando pendejadas en la red, entre blogs, páginas de minijuegos en flash, vídeos en Youtube o similares, revisión un poco obsesiva del correo y un poco de MSN, puedo ver que sí, que efectivamente me es difícil escribir, al menos en mis condiciones actuales. Se que ya dije en las primeras líneas eso de que me es difícil escribir, pero como me es tan, pero tan difícil, lo reitero, como una forma de recordármelo, y no sólo para ese propósito, sino también para saber que si sigo escribiendo a pesar de lo difícil que es, puedo estar seguro de que estoy haciendo algo por mi quimera, léase utopía. Mi sueño de poder escribir algo que se quede un buen rato en la mente de cualquier persona, si es más de una, mejor. Mi quimera es escribir algo que no sea un éxito del verano, como pasa con la Máquina del Mercado de la Música, sino que dure un poco más, digamos unos 60 veranos. Porque si de algo me he dado cuenta es que en mi actualidad (quizá en un futuro eso cambie) quiero ser conocido, apreciado, publicado... deseos casi imposibles, ¿No? bueno, de ahí mi quimera. No espero un reconocimiento inmediato: mis letras aun no pasan de mediocres. Así que no tengo afán. Espero ser reconocido a mediano plazo, signifique lo que signifique. Tengo, sin embargo, una opción a corto plazo: si lo que escribo me gusta, ya le gusta a alguien... será una perogrullada, pero saber eso podría servir de algo. Evitaré el afán, tal y como he dicho. Poco a poco el bodoque que tengo por párrafo se irá separando en partes más concretas, mi estilo se irá puliendo con ayuda de la lija de una buena crítica, mi coherencia mejorará, y todo lo que quiera decir podré ponerlo en el papel, tal y como lo imagine. Por ahora, y para ser fieles a eso de mantener la calma, hasta aquí llego, porque que sé muy bien en que este ladrillo la coherencia hace rato que se fue a su casa. Ni yo se lo que ya estoy tecleando. Me voy a dormir.

15 minutos de persecuciones y una maleta plateada

No quiero usar este blog como un diario, pero si eso me sirve como excusa para escribir algo, no tengo ningún problema. Así comienza la segunda entrada de este, mi blog.

Estuve viendo unas cuantas películas este domingo, cada cual más dispar que las anteriores. Una que me gustó mucho fue Ronin (1998), aunque no entendí nada. Las escenas de persecución estuvieron fenomenales, y la trama parece buena, pero al final mi hermano y yo terminamos rascándonos la cabeza como simios, dando mutuamente a conocer que ninguno de los dos supo entender de que trataba exactamente tal rollo. de todos modos siento que no perdí mi tiempo con el filme: DeNiro y Reno, así como el personaje de McElhone estuvieron muy bien, y las locaciones de la película me impresionaron por montones. Sólo nos quedó una pregunta: ¿Qué carajos había en la maleta que provocó muertos, daños por todas partes y que involucró a 3 países mientras pasaba de mano en mano? Parece que nunca lo sabremos. Tal vez, pienso yo, que es una de esas cosas de las que no importa ni conviene saber, y aunque al principio pensaremos por medio día en lo que pudo haber tenido la maleta (y que me recuerda mucho al maletín de Pulp Fiction, que aparte de reflejar una luz dorada en la cara de Travolta no deja saber nada más de su contenido), pronto daremos el tema por olvidado. Porque eso pasa con este tipo de películas: por muy buena que sea la trama, si pasa lo que en nuestra situación pasó, sencillamente dejaremos para nuestra memoria los 15 minutos -haciendo malas cuentas- en los que transcurrió esa maravillosa persecución por túneles, calles estrechas y autopistas de la segunda mitad, y ya. Supongo que eso tampoco importa, pues no podremos, en la mayoría de veces, esperar más de Hollywood. Esperaremos, como siempre, a que alguna joya aparezca, y la olvidaremos también.

Primeras letras

¿Por qué carajos pierdo el tiempo en tan obtusa obra? ¿Por qué quiero comenzar algo que es, como mínimo, una pérdida insensata de tiempo? ¿Por qué el pasto es verde? ¿Por qué la gente se ríe con un "Ja ja ja"? ¿Por qué no lo sabemos todo acerca del famoso alunizaje del 20 de julio? ¿Por qué no hay suficientes preguntas como para hacer de esto una especie de colección de interrogantes que suelen ser más interesantes de lo que podrían ser las respuestas? Bueno, por lo menos tengo las respuestas a las dos primeras. Es simple: porque quiero escribir. Porque necesito hacerlo. Cada día que pasa, siento que estoy perdiendo el tiempo si no conecto letras, dispuestas en un sentido en el que nazca de ellas un significado, dado por el mismo sentido del que de ellas se pueda desprender o porque alguien les de un sentido propio; el problema se da cuando comienzo a pensar que todo lo que escribo es absoluta y terriblemente estúpido. Como en este momento. y eso me bloqueaba, haciendo que no pasara de unas cuantas líneas cada mes. Bueno, eso y el hecho de que me canso de la mano izquierda al escribir a toda velocidad. Por eso decidí abrir esto, porque así tengo un espacio para poder escribir cosas estúpidas, cosas que no lo son tanto, y cosas interesantes, por lo menos para el que las escribe. Y si lo hago en un medio electrónico, con un teclado electrónico y todo electrónico, no me cansaré de la mano izquierda por escribir demasiado. Me cansaré de ambas, aunque así, por lo menos, habrá compensación.

Espero que este blog me permita ejercitarme en este duro oficio. ¿Quién sabe? a lo mejor me ponga a escribir como un oficio pago, o a lo mejor solo siga escribiendo porque es un placer. A lo mejor ambos, y sí, es mucho pedir, pero bueno, soñar un poco no viene mal después de tragar tanta realidad...